Pero eso no es todo. Huehuetenango posee un tesoro milenario, desde casi cualquier aspecto en que se le vea. La mayoría de sus comunidades todavía conservan, a través de su práctica, las tradiciones heredadas por sus antepasados. Y así como la historia describe a Huehuetenango como un lugar difícil de conquistar para los españoles, hoy día todavía conserva las costumbres que datan de mucho tiempo atrás.
Por aparte, no se puede dejar de mencionar a los líderes espirituales, quienes son considerados, en algunos municipios, como una fuente de sabiduría y autoridad capaz de guiar sus vidas a través de sus acertados consejos.
De esa cuenta, además del español, se reconoce la existencia de los idiomas como en mam, teko, awakateko, akateko, chuj, popti' y q'anjob'al, que en cierta medida se convierten en testigos que afirman que Huehuetenango es un departamento lleno de magia y riquezas ancestrales.
Hay evidencias de que hubo ocupaciones en el período Paleoindio (15,000 años antes de Cristo), de culturas cazadoras y recolectoras hasta la aparición de la agricultura. El sitio paleontológico “El Mamut” contiene muestras de este período.
La agricultura se desarrolló durante el período Pre Clásico hasta 300 años después de Cristo. Los sitios arqueológicos de Cambote, Pucal y Cucal pertenecen a este período. El período Post Clásico que duró hasta 1524 después de Cristo fue el de mayor actividad bélica debido a crisis internas.
En esta región la presencia Maya inició hace 4,000 años. A los Cuchumatanes se les supone cuna de esta lengua. También se advierte la influencia de los Olmecas. Los sitios arqueológicos de Quen Santo, Chaculá y La Libertad tienen estructuras que evidencian esto.
De estos períodos se tienen reportados 140 sitios arqueológicos en la Sierra de los Cuchumatanes, siendo Zaculeu uno de los más importantes. El sitio cuenta con más de 1,000 años de ocupación y fue considerada la ciudad más importante del señorío mam.
Las culturas regionales desarrolladas en los períodos Clásico y Post Clásico muestran la influencia mexicana de los Toltecas. Al final del Post Clásico hay presencia nahuatl en los Cuchumatanes.
Patrimonios histórico-culturales
El centro de la ciudad de Huehuetenango le permite conocer una serie de edificios que datan de principio de siglo como el Teatro Municipal, la Escuela Amalia Chávez, Edelmira Mauricio y Jacinta Molina.
La catedral también es otra obra arquitectónica que vale la pena conocer.
En esta Villa, que está a 5 kilómetros de la cabecera, el turista puede visitar la iglesia que guarda en su interior a la Virgen de Candelaria, obra representativa de la época colonial y decorada en su interior por murales realizados por Carlos Rigalt a mediados de este siglo y donde se representan escenas históricas y religiosas.
Esta virgen mantiene la tradición de peregrinajes regionales y se celebran en su honor dos fiestas anuales. Aquí, el turista encontrará artesanías de varios lugares, incluyendo artesanía de bronce y cobre realizadas con los instrumentos de la época colonial.
Estas ruinas se encuentran a unos 5 kilómetros del centro de la ciudad. Zaculeu fue restaurado en la década de los años 50 y cuenta con un pequeño museo. Cerca del lugar se encuentra un río con el mismo nombre.
Aguacatán
A 20 kilómetros del centro de la ciudad, se encuentra la cabecera del municipio de Aguacatán, donde hay que visitar la iglesia colonial y plaza dominical. Es conocido por la excelencia de sus tejidos, así como por los nacimientos del Río San Juan y el Río Blanco. El Mirador
Unos 15 kilómetros adelante, se llega al Mirador “Juan Diéguez Olaverri”, en donde se encuentra el poema “A los Cuchumatanes”, escrito por este personaje desde su exilio en Comitán, Chiapas, a principios de siglo.
Todos Santos Cuchumatán
Por la misma carretera en la vertiente oeste se llega a dicha población. Este pequeño poblado mantiene fuertemente sus costumbres, tradiciones y los trajes mayas más vistosos. La mejor época para visitarlo es el uno de noviembre cuando se celebra la feria municipal con una serie de actividades como bailes locales y carrera de caballos.
Colotenango
Los días sábados es ideal para visitar la plaza de Colotenango, que está a 40 kilómetros sobre la carretera Panamericana en dirección a la frontera con México.
Ixtahuacán
Diez kilómetros adelante se encuentra este lugar con un edificio municipal de principio de siglo que vale la pena conocer.
Nentón
En el municipio de Nentón, al noroeste del departamento, se encuentran los sitios arqueológicos de Chaculá y Quen Santo. También se localiza la laguna Yolnajab o Brava, con una longitud aproximada de 5 kilómetros, bosques subtropicales húmedos y vistas impresionantes.
Los Huista
En la misma zona de Nentón se pueden visitar los Ríos Selegua, Azul y Lagartero. Esta puede ser oportunidad para visitar la zona de los Huistas, es decir San Antonio y Santa Ana Huista, Concepción Huista y Jacaltenango. Éstos son pequeños poblados llenos de tradición y cultura.
La grandeza de los Cuchumatanes
Según los geógrafos, la cadena montañosa de los Cuchumatanes se forma con varias sierras alineadas. Además de la que lleva el nombre de la cadena, las otras se llaman: de Chamá, de Santa Cruz y Montañas Mayas.
Se cree que la sucesión de montañas, junto a la compleja cadena de Chuacús; se levantó de los fondos marinos hace aproximadamente 370 millones de años.
Era la etapa Arcaica en el planeta Tierra, y los organismos más adelantados eran peces y anfibios, cuando la evolución sólo creaba los reptiles más primitivos y era la época de los helechos primitivos, colas de caballo y licopodios. Fue un tiempo de enormes cambios geográficos.
Mucho tiempo después, reconvertidos en lecho oceánico Cretácico, los Cuchumatanes se cubrieron con enormes volúmenes de sedimentos ricos en carbonato de calcio. Posteriormente estos sedimentos se convirtieron en rocas calizas, de color blanquecino y solubles al agua, sustrato del paisaje actual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario